La foto, retocada, ha sido tomada a las cuatro de la tarde, mientras las nubes se desplazaban a gran velocidad momentos antes de que descargarse un nuevo diluvio, como tantos otros en estos dos últimos días. Apenas había la luz del relámpago. Sólo faltó que la luna se hubiera aparecido.
P.D.: Supongo que Echo & The Bunnymen estarán orgullosos de esta preciosa versión.
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