Gallo Rojo deluxe

Gallo Rojo deluxe

Izquierda Unida Pozoblanco ha editado un nuevo magazzine que le sirve como artefacto propagandístico y que ha buzoneado por todo el orbe tarugo. Bueno, en realidad, en puridad, al fin y al cabo, nuevo, lo que se dice nuevo, no es, más bien podríamos decir que es hermano carnal del histórico El Pozo y la encina y del visto y no visto Otro gallo cantaría, aquel otro magazine, aquella vez contracultural, vestido con los colores segundarrepublicanos y que contaba con tan escasa presencia femenina.  En este Gallo Rojo -que no Gallo Blanco ni rosa socialdemócrata pesoísta, cada cual con su color y en su sitio- la gente de IU escribe de la residencia, del contrato de la limpieza, de la censura en los medios -sic-  y de más cosas. Legítimamente, por descontado. Incluso dedica una viñeta -obra de alguien con nombre de hombre para no perder la costumbre- al omnipresente alcalde, Don Santiago Cabello, como dicen que le llaman los del PP. Como el contenido es recurrente y como todo el mundo lo podrá leer si ese es su deseo -escriben que lo van a colgar en la red, gratis total, se supone- no voy a entrar a valorar en lo que en él se denuncia, aunque sí me voy a comentar dos cuestiones que tienen que ver más con la ideología que con las mundanas cuestiones locales. A ello me dispongo. 1.- El magazzine ha sido publicado en papel satinado y a todo color.  Podría haber sido editado en ecológico papel reciclado, más que nada para contribuir a disminuir la emisión de gases efecto invernadero que van a acabar con el planeta en cuatro días. Pero no. A todo color y satinado.Y con letra gorda para rellenar 8 lustrosas páginas. Digamos que es un magazzine de ricos. Y ahí es donde quiero entrar yo porque entra Karl Marx, que en El Capital afirma lo siguiente: "A la par con la disminución constante del número de magnates del capital, que usurpan y monopolizan todas las ventajas de este proceso de transformación, aumenta la masa de la miseria, de la opresión, de la esclavitud, de la degradación y de la explotación; pero aumenta también la indignación de la clase obrera, que constantemente crece en número, se instruye, unifica y organiza por el propio mecanismo del proceso capitalista de producción". Y vemos que no, que las profecías del estuprador de Treveris que le encasquetó un hijo bastardo a su amigo ricachón Federico Engels lejos de confirmarse se han desvelado más falsas que la democracia popular de la Alemania Comunista a la que homenajea, vía sudadera, el feliz casado y viajero Alberto Garzón. Porque es evidente que los de IU lejos de ser más pobres son más ricos porque se gastan una pasta gansa cuando podrían gastarse muchísimo menos. Y porque en vez de ser más -proletarios, digo- son muchos menos. Gracias al Kapitalismo, dicho sea de paso.  2.- En la página 5, y a modo de corolario del artículo dedicado a la privatización de los servicios de jardines y limpieza se puede leer lo siguiente: ¡Qué bien se dispara con pólvora ajena! Acabáramos. ¡Los comunistas hablando de disparar con pólvora ajena! ¿Pero qué han sido, son y serán siempre el socialismo y el comunismo sino disparar con pólvora ajena? ¿Acaso hay que recordar la frase de Margaret Thatcher? Además, ¿no es tirar con pólvora ajena gastarse los cuartos en un panfleto de ricos cuando se deben más de 7.500.000 de euros a los bancos? Lo suyo es haberse gastado mucho menos, lo imprescindible, para dar ejemplo y destinar la demasía -ay, la plusvalía- en socorrer a la Casa Madre. Pero no.  Pero hombre, ¡si lleváis casi 200 años diciendo que la propiedad es un robo, que hay que acabar con las herencias o en su defecto subir el impuesto de sucesiones y que la democracia consiste en expropiar! ¿Y vosotros habláis de disparar con pólvora ajena? Es cierto, siendo honestos hay que escribirlo, que no solo es el comunismo el que tira con pólvora ajena -o del Rey, que también se dice, mira tú qué cosas-, pero es  verdad que nadie va tan sobrado moralmente y ni es tan arrogante como todos aquellos que quieren implantar el paraíso en la tierra creando el Hombre Nuevo. Coño, que a su lado todos los demás parecemos más egoístas y malvados que el Malamén del Comandante Lara.

Cuando el magazzine sólo era un humilde e histórico boletín en blanco y negro

¡Qué pobres éramos y qué deluxe nos hemos vuelto gracias al Kapitalismo!

Este otro gallo republicano cantó poco

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