Si ya los problemas comenzaron nada más pedir consentimiento a los Corporativos para aprobar el acta del pleno anterior -¡hey la legalidad y ese Secretario!-, el hecho relevante y diferencial del pleno y posiblemente de toda la legislatura tampoco se hizo esperar: la Oposición y el Equipo de Gobierno cada cual por su lado para tratar en dos minutos un supuestamente conflictivo trámite administrativo.
Nada más y todo eso tuvo cabida en un pleno extraordinario que de extraordinario va a tener poco por lo que se va a repetir (y no quiero pensar lo que pueden llegar a ser los próximos si para las gordas de 2012 llega la Corporación en su estado actual).
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