Chicas guerreras y Felipe González

Menuda se ha montado en Solienses por un asunto relacionado con unas jornadas en Villaralto. Aprovechando que marzo está a dos meses de mayo, va Pepa Gonzalez, que así se llama la concejala de Urbanismo, Bienestar Social y de la Mujer en el Ayuntamiento del citado pueblo, y larga en un panfleto a costa del contribuyente, por un poner, que La Junta de Andalucía es una fábrica de hacer parados, una de sus funciones es el enchufismo y crear empresas públicas para enchufar a 30.000 de su partido.

Yo creo -naturalmente, es una opinión personal- que lo que verdaderamente les ha sorprendido y escocido a muchos -ahora que el enemigo va lanzado según las encuestas al gobierno de todas partes- no ha sido otra cosa que esta señora tan echada palante de izquierdas, al parecer roja como la sangre, haya puesto a parir a los rosas del PSOE de la forma en que se suele expresar el pueblo llano dotado de cierto ademán revolucionario, esto es, sin pelos en la lengua y sin conceder prisioneros y le haya hecho el discurso a la derecha neocon y neoanarco sin que ésta haya tenido que gastar ni una sola palabra.

A Felipe Fonzález, en cambio, estas cosas le hubieran sorprendido poco. No en vano, quizás conociendo el percal, ya hace muchos años aceptaba la viabilidad de un sistema democrático sin el PCE y dejaba una frase para la posteridad: No vamos a hacer toda nuestra lucha en función de la legalidad del PCE [*].

Y es que Felipe siempre fue un visionario aunque se enterase de alguna que otra cosa por la prensa.


[*], Manuel Ortiz, Adolfo Suárez y el bienio prodigioso, Planeta 2006, página 168.