Dylan y Vargas Llosa, en Pozoblanco

- Hola, Antonio.

- Hola, S., ¿qué tal estás?

- Bien, ¿qué te pareció el concierto de Aute? Te vi por allí.

- Muy bien, me gustó mucho. Se me pasaron las dos horas y media sin darme cuenta.

- A mí también me gustó mucho. Se están viendo cosas grandes por El Silo últimamente.

- Sí. a mí este concierto de Aute me ha recordado el de Raphael, que fue un verdadero escándalo.

- Pues la cosa parece que no va a acabar aquí.

- ¿Sí? ¿Te has enterado de algo?

- Sé de buena tinta que el Equipo de Gobierno quiere echar la casa por la ventana los meses que le quedan hasta las elecciones. En cosas de Cultura quieren sorprender. Van a acabar a lo grande con ese rollo de que la Cultura es patrimonio de la progresía.

- Joer, cuéntame.

- Andan detrás de Vargas Llosa para que venga a potenciar las actividades de biblioteca y lo de los cafés literarios. Hay un músico de campanillas que se ha hecho amigo del alcalde que al parecer tiene buena relación con el reciente premio Nobel. Me han dicho que está casi hecho, sólo falta acordar la fecha.

- Pues va a a ser un punto...muy liberal.

- Pues si te ha gustado, párate a que te cuente lo otro. A Emiliano se le ha metido entre ceja y ceja traer al Bob Dylan a El Silo. ¿Sabes que va a girar el año que viene por España, no? Cultura ya ha contactado con el promotor.

- Algo de eso he leído.

- En fin, te dejo. Si me entero de algo, te lo voy contando.

- Vale. Oye...

- ¿Qué?

- ¿Puedo meter la primicia en Groovielandia?

- Hazlo, total dentro de poco todo va a saberse. Pero, como siempre, no reveles la fuente.

-Estate tranquilo. Adiós.